Si visitas Portugal para una escapada, te ayudamos a conocer qué visitar aprovechando lo cerca que está la ciudad de Lisboa de otras zonas con paisajes diferentes al que encontrarás en el corazón de la ciudad. Y esa es exactamente una de las razones por las que Lisboa es una gran opción para su alojamiento.
Si te gusta la historia y visitar monumentos es una prioridad cuando te dedicas a la cultura de otro país, en continuación te sugerimos cinco monumentos que no puedes perderte en la región de Lisboa:
Mosteiro dos Jeronimos – Monasterio de los Jeronimos
Situado en uno de los barrios más famosos, encantadores y llenos de historia de Lisboa, Belém, el Monasterio de los Jerónimos se conoce a menudo como la «joya» del estilo manuelino (una adaptación portuguesa de un gótico tardío). Este estilo combina elementos arquitectónicos de los períodos gótico y renacentista, agregándolos a un simbolismo real y naturalista, que lo hacen verdaderamente único. En 1496, el rey Manuel I pidió permiso a la Santa Sé para construir un gran monasterio a la entrada de Lisboa, cerca de las orillas del río Tajo. Comenzó a construirse en 1501 y solo terminó casi un siglo después. El rey Manuel I y sus descendientes fueron enterrados en tumbas de mármol ubicadas en el presbiterio de la Iglesia y capillas laterales del crucero. La dedicación del monasterio a la Virgen de Belém fue otro factor que influyó en la decisión real.
El Monasterio de los Jerónimos vino a sustituir a la iglesia que invocaba a Santa María de Belém, donde los monjes de la Orden de Cristo asistían a los numerosos marineros que pasaban. Por eso, el rey Manuel I elige a los monjes de la Orden de San Jerónimo, cuyas funciones eran rezar por el alma del rey y dar apoyo espiritual a la gente que partia de la playa del Restelo para descubrir nuevas tierras. Y por que fue construido sobre la arena de las orillas del río Tajo, la estructura del monasterio no sufrió muchos daños por el terremoto de 1755. En 1907 fue declarado Monumento Nacional y en 1984 fue clasificado como “Patrimonio Cultural de Toda la Humanidad” por la UNESCO.
Hay mucho más que decir sobre este monumento, pero no hay otra forma de percibir la magia que programar una visita! Muy cerca del monasterio también se puede encontrar otra joya del estilo manuelino contemporáneo con él: la Torre de Belém. Asegúrate de llevar algunos Pastéis de Belém para el camino!
Cristo Rei – Cristo Rey
Admirando la ciudad de Lisboa se destaca notablemente el Cristo Rei, imponiéndose en el paisaje cuando estamos frente al río Tajo, siendo una disculpa increíblemente buena para cruzar el puente 25 de abril hacia el lado sur.
La idea de construir el Santuario Nacional de Cristo Rei surgió en 1934 durante una visita del patriarca de Lisboa, a Brasil. Después de haber visitado el imponente Cristo Redentor do Corcovado en Río de Janeiro, quiso construir una figura similar en la capital. Es con el estallido de la Segunda Guerra Mundial que, en 1940, en Fátima, los obispos portugueses se reunieron y formularon el voto: “Si Portugal se salvó de la guerra, levantar un Monumento al Sagrado Corazón de Jesús sería en Lisboa, una señal visible de cómo Dios, a través del Amor, quiere conquistar para sí a toda la humanidad”. En 1949, como Portugal no participó en la Segunda Guerra Mundial, se colocó la primera piedra para una construcción patrocinada solo con donaciones públicas que tardará 10 años en completarse.
Aunque Cristo Rei siempre ha sido un importante destino de peregrinaje, no deja de sorprender a los menos religiosos con su plataforma de 80 metros de altura con una asombrosa vista panorámica sobre la ciudad de Lisboa y el puente «Golden Gates» portugués. (Ver más información en tugatrips.com
Palácio da Pena
Un viaje de 30 minutos en coche es el necesario para encontrar uno de los paisajes más bellos y encantadores de la región de Lisboa, con varias sorpresas cargadas de historia. Hablamos del corazón de Sintra dentro del Parque Natural y Protegido de Sintra – Cascais donde se pueden encontrar monumentos que traducen la grandeza del pueblo portugués en diferentes siglos. Hay por lo menos dos que no te puedes perder.
A unos 500 metros de altitud, en lo alto de la hermosa colina de Sintra, encontramos el Parque y Palacio de Pena, que se destaca como ejemplo de la arquitectura romántica portuguesa y como el primer palacio de este estilo en Europa (el Palacio Nacional de Pena fue construido unos 30 años antes del Castillo de Neuschwanstein, en Baviera, una de las mecas de los castillos). Data de 1839, cuando el rey consorte Fernando II de Sajonia Coburgo-Gotha (1816-1885), adquirió las ruinas del Monasterio de Nossa Senhora da Pena y empezó a adaptarlo a su palacio. Extremadamente fantasiosa, la arquitectura de Pena utiliza motivos moriscos, góticos y manuelinos, pero también el espíritu wagneriano de los castillos Schinkel de Europa central. Fue hogar de reyes entre 1834 y 1910 y hoy es una de las atracciones turísticas más buscadas, junto con su parque, que se extiende sobre 85 hectáreas, tiene los paisajes más frondosos con especies nativas y exóticas de los cuatro rincones del mundo.
Si todo esto todavía no son razones suficientes, hay aun por descubrir una hermosa historia de amor por detrás de la construcción de este palacio y también la oportunidad de comprender los hábitos y las locuras de la última familia real portuguesa. 8Ver más información en tugatrips.com
Quinta da Regaleira
Bajando desde lo alto de la colina hasta el centro del pueblo, encontrará, después de una caminada de diez minutos, la increible Quinta da Regaleira. Pronto comprenderá lo mágico que es este lugar.
Quinta da Regaleira, que inicialmente fue un espacio adquirido por la condesa de Regaleira, por tanto su nombre, es, hoy, el escenario que nos dejó Carvalho de Monteiro cuando adquirió su terreno en 1904 para construir allí su palacio y renovar los jardines que cuéntanos historias llenas de misterios y dobles sentidos.
Nacido en Río de Janeiro y poseedor de una fortuna prodigiosa (tan rico que era conocido como Monteiro de los Millones), asoció a su singular proyecto de arquitectura y paisaje, el genio creativo del arquitecto y escenógrafo italiano Luigi Manini (1848-1936). A pesar de su palacio, construido en estilo romántico revivalista, recuperando formas arquitectónicas y decorativas góticas, manuelinas y renacentistas, mezcladas con simbolismos míticos y esotéricos, reflejando su riqueza y deleitando al visitante, son sus jardines y lo que se encuentra en el camino lo que realmente lleva nuestro aliento. En este libro de piedra que es Quinta da Regaleira (Quinta significaría Villa), imprimió la visión de una cosmología, una síntesis de la memoria espiritual de la humanidad, cuyas raíces se sumergen en la tradición mítica. Utilizando referencias a la mitología, Olimpo, Virgilio, Dante, Camões, la misión templaria de la Orden de Cristo, grandes místicos y taumaturgos, los enigmas del Arte Real, la Magna Obra Alquímica, creó el escenario de un viaje iniciático, a través de un jardín simbólico, donde cielo y tierra se funden en una realidad sensible. Una visita que, mucho más que belleza, tiene tantas otras cosas que contarnos, si queremos escuchar. Recomendamos una visita guiada para no perderse ningún detalle. (ver más información en tugatrips.com
Palácio Nacional e Convento de Mafra – Palacio y Convento Nacional de Mafra
A 45 minutos de Lisboa encontrará un pueblo con una excelente cocina y uno de los palacios más importantes del país. Al estar tan cerca, hay que perder la oportunidad y ir al Convento y Palacio Nacional de Mafra.
Construido por el rey D. João V en el siglo XVIII, para cumplir una promesa de sucesión, es uno de los palacios portugueses más increíbles y el monumento barroco más importante del país. Comprende el Palacio Real, la Basílica y el Convento. Cuenta con importantes colecciones de escultura italiana, pintura italiana y portuguesa, así como dos campanas, seis órganos históricos y un hospital del siglo XVIII. Un conjunto monumental con 1200 habitaciones y 4700 puertas y ventanas. De todas, la más fascinante es probablemente la Biblioteca, una de las más bellas e importantes del mundo, que alberga alrededor de 40 mil libros en sus estanterías. Al no ser la residencia habitual de la Familia Real, el Palacio de Mafra siempre ha sido visitado por reyes, para asistir a fiestas religiosas o para cazar en la Tapada y, hoy en día, el Palacio forma parte de la Red Europea de Residencia Real. (ver más información en tugatrips.com)
¿Pudimos hacerte sentir curiosidad por visitar estos monumentos o quizás ya has visitado alguno de ellos? déjanos tu comentario y por cierto, ¡no olvides recomendar este artículo a tus amigos!
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